Muchos padres esperan que, cuando sus hijos estén listos para pasear durante el día, habrán dominado el arte de quedarse dormidos durante la noche, y en muchos casos tienen razón. Sin embargo, los niños pequeños que tienen problemas para conciliar el sueño a menudo tienen su propio conjunto de desafíos de sueño que enfrentar.
Revoloteando hasta altas hora de la noche
Una de las maneras en que un niño pequeño puede romper el descanso de una noche, que tal vez no haya estado abierto a el/ella cuando eran más pequeños, es despertarse y emprender una pequeña aventura, ya sea en su cama o simplemente en con su juguete favorito.
Cuando esto sucede, mantener la zona oscura y aburrida mientras vas caminando silenciosamente para poner a tu niño(a) de vuelta a la cama, es probablemente una de las mejores maneras de desalentarlo de hacerlo un hábito. Otra forma de evitar el paseo nocturno es comenzar un poco más antes, el período de relajación nocturna de tu niño(a) antes de acostarse, así el/ella no se sentirá como si estuviera siendo alejado(a) de algo divertido y emocionante cuando es hora de ir a la cama.
Comenzar este período de calma poniendo los juguetes lejos de el/ella, especialmente los visibles desde la cama, puede ayudar a que la habitación se sienta un poco menos-demasiado-divertida para dormir cuando llegue el momento de apagarse las luces.
Si la firmeza y haciendo que los alrededores de tu niño(a) se sientan tan aburridos como sea posible no están ayudando, también hay algunas maneras de lidiar con noctámbulos que pueden sentirse un poco como si estuvieran dejándose controlar, pero que muchas familias encuentran que son mejores para el beneficio de todos, en vez de continuar con la batalla durante la hora de acostarse. Primero, si hay una luz tenue en la habitación de tu niño(a), puedes ofrecerle la opción de llevar un libro a la cama. De esta manera, si el/ella se despierta en medio de la noche, podrá «leerse» a si mismo para nuevamente dormirse, y siempre cuidando que no pueda levantarse de la cama. Esto es generalmente una buena idea solo para las familias que utilizan una luz en la noche, puesto que introducir una innecesariamente, puede causar dificultades para conciliar el sueño.
Algunas familias incluso encuentran que compartir la cama con el pequeño errante de vez en cuando, puede ser bueno para el sueño de todos, siempre y cuando no se convierta en un hábito no deseado.
Asociaciones del sueño
Al igual que cuando tu niño(a) era un bebé, sus asociaciones también tienen que ver con lo que puede estarle causando problemas en el sueño. Tal vez tu ya no haces malabares para que tu niño(a) se duerma, pero si el/ella está acostumbrado(a) a quedarse dormido(a) contigo en la habitación, y luego se despierta y no te encuentra, eso seguramente puede causar problemas.
Es normal que los niños se despierten durante la noche, al igual que es normal que los adultos se despierten durante la noche, a pesar de que los adultos a menudo son tan buenos en volver a dormirse que ni siquiera lo recuerdan. Ahora es el momento de que tu niño(a) empiece a construir esas mismas habilidades y una forma de ayudarle, es asegurarse de que no cuente con ninguna de esas condiciones para quedarse dormido, porque de lo contrario, se va a mantener despierto durante toda la noche.
Esto significa que poner un poco de música o de ruido blanco para quedarse dormido podría ser un problema a menos que estés planeando en jugar toda la noche con tu niño(a). Esto no significa que las canciones de cuna no deban ser parte de una rutina para acostarse. Sólo significa apagar la música para que no este sonando toda la noche mientras tu niño(a) está en ese estado de sueño pero despierto. Dormido pero despierto también puede ser un buen estado para que salgas de la habitación, si el/ella está teniendo problemas para volverse a dormirse por la noche sin tu presencia alrededor. Otras estrategias, como rieles de cama para evitar que un animal de peluche favorito caiga durante la noche, o mantener unos chupos en la cama para que el/ella pueda encontrar alguno más fácilmente al intentar quedarse dormido durante la noche también puede ayudar. Si estás tratando de eliminar una asociación de sueño, la introducción de una nueva, como una manta o un juguete especial, puede ayudar a llenar el vacío.
Lo importante de las asociaciones de sueño es averiguar exactamente qué es de lo que tu niño(a) depende para quedarse dormido, y ver si puedes encontrar una manera de alterar esas condiciones para que sean lo suficientemente estables para que el/ella sea capaz de depender de ellos durante los despertares nocturnos.
El efecto acumulativo
Si un niño pequeño ha tenido problemas para dormir durante un tiempo, el/ella puede estar agotado, además de cualquier otro problema que pueda llegar a tener. Mover la hora de acostarse un poco antes, al menos temporalmente, puede ayudar a cualquier otra estrategia que puedas utilizar para ayudar a tu niño(a) a tener un descanso ininterrumpido. No importa cuál era el problema para empezar, resolverlo sólo se hará más difícil y aún más cansado estará tu niño(a).
Fuentes
- Jodi Mindell, et al. «Behavioral Treatment of Bedtime Problems and Night Wakings in Infants and Young Children.» American Academy of Sleep Medicine. 29(10). Web. 2006.
