Cómo crece la personalidad del niño pequeño

Nadie puede negar que los niños pequeños tienen una gran personalidad – a veces, parece que tienen más personalidad de lo que realmente puede caber en esos cuerpecitos. Lo que es menos obvio es que las personalidades que empiezan a aparecer conforme avanza la edad del niño(a), a menudo muestran una imagen bastante precisa o las personalidades que esos niños van a tener a través de la niñez, adolescencia y adultez.

¿Qué tan estables son las personalidades de los niños pequeños?

Son raros los estudios que siguen en el tiempo a niños pequeños y recopilan datos a lo largo de muchos años, ya que son costosos y difíciles de ejecutar, lo que significa que no hay muchas opciones para elegir. Sin embargo, de los que existen, en general coinciden en que, alrededor de los 3 años de edad, ciertos rasgos de carácter generalmente pueden definir una personalidad. Esto significa que un niño(a) tímido de 3 años de edad puede estar pasando por esa fase, o quizás esa timidez podría quedarse por más tiempo. Los niños pequeños a medida que crecen, cambian a lo largo de sus vidas, así que es totalmente posible que el niño más incontrolable, florezca en un adolescente estudioso, especialmente si el/ella tiene influencias en su vida que alienten ese tipo de comportamiento.

Los cambios en las personalidades de los niños son diferentes de las fases que cursan porque comienzan a partir del rasgo que los caracterizaba cuando tenían una edad más temprana. Incluso si un niño que le gustaba estar saltando siempre, se convierte en un preadolescente que le tiene miedo a las alturas y es cuidadoso al pasar a lado de las repisas, el/ella comenzó como un(a) niño(a) al que le gustaba la adrenalina de saltar alrededor de la casa. Un estudio longitudinal publicado en el año 2003, siguió en el tiempo a mil niños pequeños hasta la edad de los veinte años, en él se destacó tanto la consistencia de los rasgos de personalidad de la población estudio cuando eran niños, así como también, su capacidad de cambio.

Sin embargo, una cuestión planteada por el estudio fue si los cambios que se observaron fueron en realidad cambios en la personalidad, o simplemente cambios en los comportamientos. Si un niño hablador aprende a escuchar más a medida que el/ella crece, eso no significa necesariamente que en un futuro hable menos. En su lugar, podría significar que el/ella ha aprendido a valorar la escucha, así como hablar, o ha aprendido a que es más aceptable socialmente, tomar turnos cuando se tiene una conversación.

Comportamientos emergentes en la niñez

Algunas partes de la personalidad de un niño han estado presentes de alguna forma u otra desde la infancia, pero otros sólo se están desarrollando. Sería difícil para un nuevo padre predecir cuán imaginativo será su hijo de 6 meses, ya que el/ella no sólo no tiene la habilidad verbal de compartir su imaginación, sino que también puede estar formando su marco cognitivo que necesitará para entender el mundo lo suficiente para imaginar cosas nuevas en él.

Otro aspecto de la personalidad que se desarrolla en la niñez, es la capacidad de atención. Dar a los niños la oportunidad de divertirse, o dirigir su propio juego, puede ayudar a estimular la atención. La duración de la atención es uno de esos factores que pueden influir en el grado de independencia de un niño, el grado de seguridad que el/ella sienta y la cantidad de paciencia que tenga, y los padres y cuidadores pueden estimular un período de atención saludable a medida que el niño crece.

Conocer a su niño va a ser una de las aspectos más importantes en los próximos años. Así como también, el/ella va a conocerse mejor cada día, a medida que su personalidad crece, y posiblemente, vaya a estar influenciado por numerosas y diferentes personas, pero eso justamente, va a ser su guía, y su ejemplo a seguir, lo cual va a ejercer el impacto más fuerte para permitirle ser la persona que quiere ser.


Fuentes
  • Linda Carroll. “Personality may be set by preschool.” NBCNews. NBC News, January 15 2008. Web.
  • Avshalom Caspi, et al. “Children’s Behavioral Styles at Age 3 are Linked to Their Adult Personality Traits at Age 26.” King’s College London & University of Madison at Wisconsin. 71(4): 496-513. Web. 2003.
  • Avshalom Caspi, et al. “Undercontrolled temperament at age 3 predicts disordered gambling at age 32: a longitudinal study of a complete birth cohort.” Psychological Science. 23(5): 510-6. Web. May 2012.
  • Alix Spiegel. “Siblings Share Genes, But Rarely Personalities.” NPR. National Public Radio, November 22 2010. Web.
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