Pedir ayuda no es fácil en el mejor de los casos, y tratar con la DPP puede hacer que sea mucho más difícil, ya que la depresión tiene una forma de ampliar las dudas y las inseguridades hasta que se sienten enormes. Sin embargo, la depresión posparto no es una debilidad, y no es culpa de nadie. Más que eso, buscar ayuda y obtener apoyo, tanto de proveedores de atención médica como de amigos, familiares y su comunidad puede ser una parte importante de la recuperación de DPP. Los pacientes con DPP que tienen fuertes sistemas de apoyo, y un bajo nivel de estrés sobre la familia y las relaciones tienden a recuperarse más rápidamente, mientras que el aislamiento y la falta de apoyo puede contribuir a la DPP y a que este se prolongue.
Sin embargo, es importante considerar pedir ayuda, y buscar la menor manera de hacerlo. Es una estadística común que una de cada siete mujeres sufre de DPP en algún momento después del parto, pero lo que es más difícil de determinar es cuántas mujeres sienten que podrían estar experimentando DPP, pero no buscan ayuda para ello. Las encuestas informales sugieren que este número puede ser alto. No hay una sola manera de pedir ayuda cuando se trata de DPP. Todo lo que necesita hacer es averiguar la manera que es más adecuada para usted.
- Comienzo en casa: Su pareja es una persona importante con la que puede hablar acerca de la posibilidad de DPP o un diagnóstico de ello, pero no son la única persona con la que puede hablar cerca de su hogar. Padres, amigos, hermanos o cualquier persona cercana a usted, puede ser una gran ayuda también y en quien puede confiar. Con la alta tasa de DPP y el silencio que la rodea, incluso puede encontrar que algunas de las personas en su vida saben más sobre el tema que lo que podría haber adivinado.
- Darle una nota al Doctor: Cuando se trata de problemas de salud mental, especialmente para las mujeres que nunca han tenido problemas de salud mental en el pasado, la DPP puede ser fácil de explicar y difícil de hablar como el problema de salud grave que es. Hablar primero con un médico, y salir de su cita con información sobre la DPP, un diagnóstico y el comienzo de un plan de tratamiento, puede ayudarle a entrar en una conversación con las personas en su vida con más confianza y una mejor idea de lo que sus necesidades puedan ser.
- El encanto de los extraños: A menudo, las cosas más difíciles de pasar en la vida son también las cosas más difíciles de hablar, especialmente a las personas más cercanas a usted. Hablar con extraños, ya sea un médico en una clínica ambulatoria en lugar de su proveedor de atención primaria de confianza, o un grupo de apoyo de DPP, en lugar de sus amigos más cercanos, puede ser una opción liberadora.
- Busque a un Grupo de Apoyo: La gran mayoría de las mujeres que contactan a proveedores de atención médica, familiares y amigos para recibir ayuda sobre la DPP, reciben ayuda y apoyo. Para algunos, sin embargo, el camino para obtener la ayuda que necesitan puede ser difícil, y varios grupos de apoyo han crecido para tratar estas preocupaciones. Si está nervioso de pedir ayuda, hablar primero con una persona que participe o dirija estos grupos de apoyo, antes de acudir a su médico puede ayudarle a sentirse preparado antes de entrar al consultorio del médico.
Fuentes
- Cheryl Zauderer. “Postpartum Depression: How Childbirth Educators Can Help Break the Silence.” Journal of Perinatal Education. 18(2): 23-31. Web. Spring 2009.
