Señales de que tu niño está listo para dejar una siesta y cómo hacerlo

Hay un gran número de códigos de niños pequeños que a los padres y cuidadores les encantaría poder descifrar, pero el secreto del horario perfecto para dormir de un niño pequeño podría ser el más difícil de precisar de todos. Las habilidades lingüísticas de los niños pequeños crecen cada día, pero sus necesidades de sueño evolucionan y cambian con la misma rapidez, y no siempre son capaces de mantenerse al día lo suficientemente bien como para hacerte saber lo que necesitan. Si el horario fluido de sueño de tu niño pequeño ha pasado por un mal momento, podrías estar preguntándote si la culpa es de las siestas. Sin embargo, antes de dar el paso de quitar una siesta, es importante asegurarte de que eso es lo que tu chiquitín realmente necesita.

Señales de que su niño pequeño está listo para dejar una siesta

Entre uno y dos años de edad, casi todos los niños pequeños bajan de dos siestas al día a una, y para la mayoría de los niños, esto sucede antes de cumplir un año y medio de edad, lo que significa que incluso si tu pequeñín no está listo para dormir una siesta ahora mismo, hay una buena posibilidad que lo estará muy pronto. Aún así, es importante esperar hasta que tu peque está listo – ningún padre o cuidador quiere pelear con un niño pequeño que no está durmiendo cuanto necesita. Si tu pequeño tiene problemas para dormir, pero no encaja en el perfil de un niño pequeño que solo está listo para una siesta al día, todavía puedes intentar jugar con el horario de la siesta para tratar de encontrar la mejor fórmula para dormir mejor. Esto podría significar mover las siestas o la hora de acostarse para empezar más temprano o más tarde para asegurarte de que el horario para dormir le de el descanso que necesita.

  • Las siestas se acortan consistentemente: Una o dos siestas más cortas no forman un patrón, pero si las siestas de tu niño se están reduciendo consistentemente y permaneciendo más cortas que las que había estado disfrutando anteriormente, podría ser una señal de que tu chiquitín está listo para dormir un poco menos durante el día, y que aglomerando ese sueño durante el día en una siesta más larga en lugar de dos más cortas puede ser mejor para su bienestar en general.
  • Perturbación del sueño nocturno: El sueño intranquilo durante la noche y el hecho de que de repente empiece a despertarse regularmente más temprano en la mañana puede ser una señal de que tu niño pequeño está durmiendo más durante el día que lo que necesita. Esto puede ser difícil, sin embargo, porque el sueño intranquilo también puede ser un signo de cansancio excesivo. Lo importante es recordar que dormir una siesta no es para que los niños duerman menos, sino para que su sueño se consolide más. Incluso una vez que ya duermen una siesta al día, los niños pequeños de entre 1 y 2 años necesitan entre 11 y 14 horas de sueño, es sólo la distribución la que cambia.

Durante este tiempo, la resistencia a la siesta puede parecer una señal de que se está dispuesto a dejar una siesta, pero a su edad, tu pequeñín es probable que se resista a la hora de la siesta por un sinnúmero de razones, incluyendo ansiedad por la separación, un deseo de decirte «no» y tener control sobre la forma de su día y una resistencia a la gran transición que la siesta hace del juego activo que por lo general llena gran parte de su tiempo. La resistencia a la siesta puede ser un signo de que la siesta no está funcionando para un niño pequeño si no la deja, o si, después de resistirse a una siesta, se despierta después de dormir poco tiempo. Sin embargo, por sí sola, la resistencia a la siesta generalmente no es una señal de que la siesta no es necesaria.

Al final, el comportamiento de un niño pequeño es la mejor indicación de si está o no está durmiendo lo suficiente, o durmiendo en una distribución que le funciona bien. Si tu chiquitín está durmiendo profundamente durante la noche, el comportamiento al despertarse es la mejor manera de saber si duerme lo suficiente – despertarse de forma independiente y de buen humor y luego moverse a través del día energéticamente es una gran señal de que tu peque está durmiendo lo suficiente.

Pasos hacia las siestas del futuro

Una vez que hayas decidido que tu pequeñíin está listo para empezar a vivir la vida con una sola siesta, hay algunas estrategias diferentes que puedes utilizar para facilitarlo. Generalmente es una buena idea hacer la transición gradual en lugar de un cambio rápido, ya que los cuerpos de los niños pequeños cuentan con la rutina para trabajar con los patrones de sueño de sus cuerpos.

  • La siesta de la mañana: Una de las estrategias principales y efectivas para la transición de dos siestas a una es comenzar moviendo gradualmente la siesta de la mañana a una hora de inicio más tarde, 15 minutos a la vez. La siesta de la tarde entonces comienza a acortarse en respuesta, hasta que la siesta de la mañana comienza a primera hora de la tarde, y eres capaz de recortar la siesta de la tarde por completo.
  • La eliminación de la siesta matutina: La otra estrategia principal es acortar lentamente la siesta de la mañana hasta que tenga más sentido recortarla por completo. A medida que esto avanza, también puede ser útil mover la siesta de la tarde hasta que sea un poco más temprano. Qué tan temprano depende de la hora de acostarse del niño y de su nivel de energía personal, pero generalmente, una siesta en la tarde que comienza un poco después del almuerzo tiende a funcionar bien.

Durante este tiempo, puede ser útil hacer un poco de matemáticas para asegurarse de que tu hijo todavía duerme la cantidad adecuada cada 24 horas. Dormir una siesta no significa necesariamente dormir menos, y el sueño es más importante que nunca para el aprendizaje y el crecimiento de los niños pequeños. Algunas familias descubren que, a medida que la hora de la siesta se convierte en una zona de batalla, el simple hecho de llamarla «tiempo tranquilo» puede ayudar a evitar parte de la resistencia a la siesta que puede venir con la edad, incluso en los niños que todavía dependen de las siestas para una cantidad significativa de su descanso. Averiguar la fórmula correcta para la hora de la siesta en esta etapa de la niñez puede ser difícil, pero incluso si hay algunos baches a lo largo del camino, el sueño de tu chiquitín empezará a equilibrarse en poco tiempo. Si te preocupa que tienes problemas para asegurarse de que tu pequeño reciba el descando que necesita, no dudes en hablar con su pediatra.


Fuentes
  • Malia Jacobson. «Dropping a Nap Without Drama.» San Diego Family. San Diego Family. Web.
  • William Sears. «Ask Dr. Sears: No Longer Needs a Nap?» Parenting. Meredith women’s network. Web.
  • Heather Turgeon. «Should your child be napping?» Washington Post. Washington Post, February 26 2015. Web.
  • «National Sleep Foundation Recommends New Sleep Times.» Sleep Foundation. National Sleep Foundation, February 2 2015. Web.

Related Topics

Find the Ovia app for you!
Get our app at the Apple App Store Get our app at the Apple App Store Get our app at the Google Play Store Get our app at the Google Play Store