¡Ayuda! ¡Mi niño no come carne!

Cuando tu hijo pequeño decide una sección entera de la pirámide alimenticia (si tu familia no está tan metida en las fuentes de legumbres e imitaciones de proteínas de la carne), puede realmente estropear tu sistema de comidas.

La proteína es una gran parte de la dieta equilibrada de muchas familias, pero es perfectamente posible para la mayoría de la gente obtener una nutrición completa sin comer carne. Hay muchas maneras de tratar de convencer a tu pequeño de volver a la dieta normal de tu familia, pero si prefieres dejar que decida cuándo o si está listo para comer carne de nuevo, es importante asegurarse de que está recibiendo todos los nutrientes que obtendría de la carne de otra fuente.

  • Proteína: Un componente esencial en el crecimiento de los huesos y los músculos, también se encuentra en los granos enteros y las legumbres como los frijoles.
  • Riboflavina: Ayuda a construir nuevas células, mantiene las células sanas y mejora el metabolismo, y se encuentra en la carne, así como en el yogur, los hongos, las espinacas, las almendras y otros alimentos.
  • Tiamina: Necesaria para el desarrollo del cerebro, así como para el buen funcionamiento del corazón y el sistema nervioso. Se puede encontrar en las fuentes de carne, así como en los huevos, el yogur, las nueces, las semillas y los productos de soya.
  • Niacina: Responsable de convertir la glucosa en energía. Aparte de los productos cárnicos, la niacina se puede encontrar en aguacates, patatas, setas, cacahuates y algunas legumbres.
  • Vitamina D: Es un componente clave en la regulación de los procesos corporales, específicamente el desarrollo de los huesos, la vitamina D puede encontrarse en la leche fortificada, los cereales fortificados, el yogur o el jugo fortificado, o naturalmente en las almendras o la avena.

Si todavía tienes la esperanza de que tu pequeño puede ser persuadido para obtener todos estos nutrientes de la carne, hay algunas estrategias diferentes que puede probar.

Hacer que la comida sea atractiva

La presentación puede no ser todo, pero juega un papel importante en el proceso de toma de decisiones de muchos niños sobre lo que van a comer. La vista es uno de los cinco sentidos que hará que tu hijo acepte o ignore un determinado plato, pero eso no significa que tengas que hacer algo exagerado. Añadir diferentes colores al plato, moldearlo a varias formas o servirlo en un plato de dibujos animados puede marcar la diferencia.

Reducir el tamaño de la porción

No es raro que el apetito de un niño disminuya durante los años en que empieza a andar, y la carne puede resultar cansadora para las pequeñas bocas que todavía se están acostumbrando a masticar. Estas dos cosas significan que servirle una buena porción de carne tan pronto como se siente a comer puede ser intimidarlo y hacer que no coma nada.

En cambio, ofrecer porciones más pequeñas, y porciones que se cortan en trozos más pequeños, e incluso se mezclan con otros platos, puede ser la mejor manera de convencerlo de que la carne no es tan mala. Estrategias como esta no tienen que durar para siempre y pueden ayudar a construir el apetito de un niño pequeño por la carne hasta que lo este disfrutando mucho, y puede que esté listo para más.

Ofrecer opciones

Los niños pequeños son como cualquier otra persona – tienen gustos e intereses, y no les gusta sentir que no tienen control sobre lo que comen. Si tu pequeño está actuando renuente a comer cualquier proteína animal que se haya puesto en su plato, darle una elección de cual, con el entendimiento de que tiene que elegir, va a probar aunque sea un mordisco del que eligió.

Ofrecerle dos opciones claramente definidas como la fuente de proteína en la cena le da una sensación de control sin abrumarlo o hacerte trabajar más a ti.

Alimentos para comer con los dedos

Los niños pequeños son más propensos a comer cosas que pueden alimentarse por sí mismos, y alimentarse con facilidad, por lo que ofrecer carne como alimento para comer con los dedos puede ayudar a eliminar algunos de los factores de frustración.

Lo más importante, en este punto, es que no caigan en el hábito de tener luchas de poder por la comida. Alcanzar estos objetivos puede significar ser un poco flexible durante los años de la infancia, pero los hábitos alimenticios saludables que lo ayudes a establecer ahora tendrá un efecto en su forma de comer por el resto de su vida.


Fuentes

  • «Tamaño de las porciones para los niños pequeños».Academia Americana de Pediatría. Academia Americana de Pediatría, 7 de marzo de 2017. Recuperado el 30 de enero de 2018. https://www.healthychildren.org/English/ages-stages/toddler/nutrition/Pages/Serving-Sizes-for-Toddlers.aspx.
  • «Consejos para prevenir las molestias alimenticias».Academia Americana de Pediatría. Academia Americana de Pediatría, 21 de noviembre de 2015. Obtenido el 30 de enero de 2018. https://www.healthychildren.org/English/healthy-living/nutrition/Pages/Tips-for-Preventing-Food-Hassles.aspx.
Find the Ovia app for you!
Get our app at the Apple App Store Get our app at the Apple App Store Get our app at the Google Play Store Get our app at the Google Play Store