Nunca es demasiado pronto para hablar con tu médico sobre tus opciones anticonceptivas para después del parto. Si empiezas a planear ahora, ¡tendrás un objeto menos para hacer malabares cuando tu nuevo y dulce paquete esté aquí!
Según el Colegio Americano de Obstetricia y Ginecología (American College of Obstetrics and Gynecology), la fertilidad regresa rápidamente después del parto para muchas mujeres – de hecho, cerca de un cuarto de las mujeres pueden quedar embarazadas nuevamente dentro de los 40 días de haber dado a luz.
Pensar en un hermano para tu nuevo bebé es una decisión muy personal para cualquier familia, pero hay factores de salud que son una parte importante de cualquier decisión de planificación familiar. Los estudios han encontrado que esperar alrededor de 18 meses antes de quedar embarazada disminuye el riesgo de parto prematuro y otras complicaciones del embarazo. Para evitar embarazos no deseados durante esta ventana, es una buena idea empezar a pensar en el control de la natalidad y hablar de tus opciones con tu proveedor. Algunos proveedores mencionarán las opciones anticonceptivas durante tus consultas prenatales, pero otros no. Siempre debes sentirte libre de iniciar esta conversación con tu proveedor durante cualquier visita.
Cuándo hablar con tu médico
Puede ser útil comenzar a hablar con tu proveedor sobre la anticoncepción posparto mucho antes de la fecha prevista de parto. Hay algunos métodos que puedes obtener inmediatamente después del parto (como un DIU o un implante), por lo que es una buena idea hablar con tu proveedor con anticipación. Si no tienes la oportunidad de hablar de ello antes de que nazca tu bebé, tu chequeo de seis semanas después del parto es otro buen momento para hablar sobre el control de la natalidad.
Explorar tus opciones
Existen muchos tipos de anticonceptivos que son efectivos y seguros para que los usen las personas que están en período de posparto y lactancia. Debido a que tu médico le ha dado seguimiento a tu salud durante el embarazo, puede ayudarte a asegurarte de que el método anticonceptivo que elijas sea seguro para ti. Existen varios métodos que se pueden utilizar inmediatamente después del parto, y tener esta conversación ahora puede ayudarte a resolver todo desde el principio, de modo que no tengas que pensar en ello más tarde.
Ahora es un buen momento para explorar opciones que tal vez no hayas utilizado en el pasado. Es posible que descubras que los métodos anticonceptivos que antes parecían fáciles de usar, como las píldoras anticonceptivas, son más difíciles de manejar después de que tienes a tu bebé, por lo que es importante que imagines tu vida posparto mientras tomas esta decisión. Si estás planeando seguir con un método que requiere cierta diligencia diaria, tal vez quieras poner una alarma para recordarte de tomarlo (y para despertarte de una muy necesaria siesta posparto).
Tener estas conversaciones desde el principio es una buena manera de asegurarte de tener lo menos posible de lo que preocuparse en el momento en que tu bebe llegue.
Fuentes
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