Group of children smile with their arms around each other

Tu guía para los ocho años

Esta guía pretende ofrecer un contexto de lo que puedes esperar del desarrollo neurotípico de un niño de ocho años. Los hitos y el desarrollo son diferentes para cada persona.

Puede que hayas oído el dicho «niños más grande, problemas más grandes». Puede que tu hijo o hija de ocho años te dé ganas de decir esto. A medida que crecen, la vida puede complicarse para los niños de esta edad que atraviesan la transición hacia la niñez intermedia. Su deseo de ser más independientes puede traer algún conflicto, pero la buena noticia es que también es muy divertido pasar el rato con ellos mientras aprenden y exploran todo lo que el mundo tiene que ofrecer.

Los cerebros de los niños de ocho años son todavía algo inmaduros, lo que significa que, aunque pueden tener pensamientos complejos, también se distraen con facilidad y son incapaces de seguir tus instrucciones. Otro ejemplo de la inmadurez cerebral es cómo su creciente sentido de la conciencia les provoca miedo y ansiedad (enlace en inglés). Por eso siguen necesitando tu ayuda para entender las cosas cuando no comprenden los temas difíciles, para que no se asusten ni se pongan nerviosos.

Los cambios de humor a esta edad pueden ser un reto para padres e hijos, sobre todo cuando entran en juego las hormonas de la pubertad. Aunque quieren que se les trate como a adultos, al final de una gran crisis o de un día duro, sigue queriendo que le consuelen. Se sabe que algunos padres frustrados llaman a esta época «los ochos extremos», pero no te preocupes, esta útil guía te dará la información que necesitas para enfrentar los «ochos» con confianza y éxito.


Los principales hitos del desarrollo a los 8 años

Hitos del lenguaje y la comunicación a los 8 años

Por lo general, los niños entienden más palabras y conceptos de vocabulario de los que pueden expresar. Si te preocupa que las habilidades lingüísticas se hayan desarrollado con lentitud, pregunta a sus maestros y proveedores de atención médica sobre la posibilidad de realizar una evaluación del habla y el lenguaje (enlance en inglés).

A los 8 años, tiene la capacidad de:

  • Seguir más órdenes seguidas de las que podían a los 7 años.
  • Conocer más de 3,000 palabras diferentes.
  • Que un desconocido pueda entender su hablar casi todo el tiempo.
  • Escribir de manera correcta palabras de uso frecuente.
  • Comenzar las frases con mayúsculas e intenta utilizar signos de puntuación.
  • Crear palabras que rimen.
  • Identificar letras, palabras y frases.

Hitos del aprendizaje social y emocional a los 8 años

Es normal que a esta edad cometa errores mientras afina sus habilidades sociales y emocionales. Busca momentos de enseñanza en los que puedas ayudarle a hacerlo mejor.

Puedes observar que:

  • Muestra más independencia de los padres y familiares.
  • Tiene necesidad emocional de tener amistades.
  • Comprende mejor los puntos de vista de los demás.
  • Se preocupa más por su aspecto e incluso pedir un peinado o ropa específica para vestir.
  • Colabora más.
  • Experimenta la presión social.
  • Tiene necesidad de tiempo a solas o de un descanso de las situaciones sociales.
  • Tiene mejor capacidad para manejar emociones como la ira, las frustraciones o las decepciones.
  • Busca un abrazo u otros gestos de consuelo físico de ti o de otros cuidadores durante situaciones estresantes.

Habilidades cognitivas a los 8 años

Es normal que la escuela se convierta en un reto para todos los niños de ocho años a medida que aumenta la carga académica. Sin embargo, los problemas escolares pueden ser un signo de problemas de aprendizaje, de atención o de acoso escolar. Habla con su maestro sobre lo que te preocupa para que pueda recibir la ayuda necesaria para aprender a amar el aprendizaje y la escuela.

A los 8 años, tiene la capacidad de:

  • Escuchar con atención en situaciones de grupo.
  • Resumir una historia que ha leído de forma correcta y completa.
  • Disfrutar de la lectura por placer, ¡hurra!
  • Leer con fluidez libros de nivel de grado.
  • Utilizar el pensamiento abstracto y los símbolos en problemas matemáticos complejos.
  • Sumar y restar números de 1,000.
  • Comprender las fracciones.
  • Decir la hora y mostrar una mejor comprensión de cuánto duran los incrementos de tiempo (por ejemplo, la diferencia entre 20 minutos y 2 horas).
  • Concentrarse durante más tiempo en una sola tarea.
  • Contar hacia atrás.
  • Enumerar de forma correcta los días de la semana y los meses del año.

Habilidades físicas y motoras a los 8 años

A los 8 años es cuando las habilidades físicas y motoras se vuelven más precisas y afinadas. Te sorprenderá verle hacer joyas con destreza, batear una pelota de béisbol, dar una voltereta o tocar un instrumento de cuerda. Pero, por desgracia, más independencia y menos supervisión adulta pueden poner a los niños de 8 años en peligro de sufrir lesiones por caídas y otros accidentes.

A los 8 años:

  • Tendrá una motricidad más fluida y notarás que giran, dan vueltas y saltan con más suavidad y coordinación.
  • Será capaz de vestirse y hacer su cuidado personal por completo.
  • Puede jugar con un balón y lanzarlo con fuerza y precisión.
  • Mejorará la fuerza muscular y la resistencia y será más hábil en el atletismo.
  • Tendrá una escritura más pequeña y ordenada con todas las letras del mismo tamaño.
  • Puede aprender a tocar un instrumento musical.
  • Podrá recortar objetos de forma irregular con tijeras.

Vacunas a los 8 años

Si a los 8 años tiene al día todas las vacunas recomendadas, solo hay dos vacunas adicionales que puede recibir este año. Estas son:

  • Influenza (gripe): Todas las personas mayores de 6 meses de edad deben vacunarse contra la gripe todos los años.
  • COVID-19: (refuerzos según las recomendaciones actuales de los CDC).

Si se ha saltado alguna vacuna, ahora es un buen momento para que se ponga al día. Pide cita para ponerse al día con la vacuna para estar protegido contra cualquiera de las siguientes enfermedades: tétanos, difteria, tos ferina (Tdap), hepatitis A (HepA), hepatitis B (HepB), polio (IPV), sarampión, paperas, rubéola (MMR) y varicela.

Alimentación sana y actividad física a los 8 años

  • Sírvele una dieta balanceada (enlace en inglés) con proteínas magras, cereales integrales, frutas, verduras y productos lácteos bajos en grasa.
  • Elige productos lácteos sin grasa o bajos en grasa, como leche, yogur, queso o bebidas de soya enriquecidas.
  • Anímale a comer frutas frescas, enlatadas, congeladas o secas, en lugar de jugos.
  • Intenta proporcionar cada semana una variedad de verduras, incluidas las de color verde oscuro, rojo y naranja, frijoles y guisantes, feculentas y otras. Evita los alimentos y bebidas con alto contenido en azúcar, sal y grasas.
  • Una merienda saludable para después de clases (enlance en inglés) puede ayudarles a concentrarse en las tareas y darles la energía que necesitan para jugar activamente, hacer deporte u otras actividades extraescolares. Prepara meriendas saludables para los niños que no llegan a casa enseguida.
  • Si tienes que cenar temprano, sáltate la merienda y prueba a ofrecerles antes la ensalada o la verdura que preparas para la cena para quitarles un poco el hambre.
  • A los 8 años debe realizar al menos 1 hora de actividad física al día.
  • Anímale a pasar tiempo libre afuera. Si les interesa la danza, el deporte u otra actividad, es un buen momento para pensar en inscribirlos.
  • Debe dormir entre 9-12 horas (enlace en inglés) cada noche. 

Mantener los niños de 6 años seguros

  • Mantenle en un asiento elevado en el asiento trasero hasta que mida al menos 150 cm (4 pies y 9 pulgadas). Los niños suelen alcanzar esta altura cuando tienen entre 8 y 12 años. Comprueba las directrices sobre altura y peso del asiento elevado y consulta siempre al pediatra si tienes dudas.
  • Ayúdale a cruzar la calle hasta los diez años o más.
  • Asegúrate que siempre lleve casco cuando monte en bicicleta, patinete o patineta. Además, no permitas que ande por la calle. Las lesiones son la mayor amenaza para su seguridad en los primeros años escolares.
  • Supervisa siempre cuando esté cerca del agua y considera la posibilidad de que reciba clases de natación.
  • Protege del tabaquismo pasivo, que aumenta el riesgo de enfermedades cardíacas y pulmonares. El vapor de segunda mano de los cigarrillos electrónicos también es perjudicial.
  • Conoce dónde está y qué adulto responsable está presente. Hagan planes sobre cuándo te llamará, dónde puede encontrarte y cuándo le esperas en casa.

Tiempo de pantalla

La Academia Americana de Pediatría no tiene recomendaciones específicas sobre el tiempo frente a la pantalla para niños mayores de cinco años. En su lugar, aconsejan crear un Plan familiar de uso de pantallas juntos para fijar las expectativas. Revisa con regularidad el plan de familiar de uso de pantallas y el tiempo que pasan frente a las pantallas. Asegúrate de que el juego en línea esté equilibrado con el juego fuera de línea y otras actividades que sean buenas para su salud física, emocional y mental.

  • Recuérdale que no todo lo que lee o ve en Internet es cierto o real, y que los anuncios y las publicidades a menudo no son «verdaderos».
  • Enséñale a no hablar con extraños por Internet y a avisarte si un desconocido intenta hablarle por Internet.
  • Recuerda que los controles parentales pueden evitar que vea lo que aún no está preparado para ver.
  • Instala notificaciones de permisos parentales y revisa todas las aplicaciones, sitios y programas que solicite antes de permitirle descargarlos o verlos.
  • Revisa a menudo el historial del navegador para ver qué sitios web visita.
  • Enséñale a no compartir nunca información privada en Internet y controla su actividad con regularidad y sin avisar.

Temas de conversación y trucos de parentalidad para niños de 8 años

Preguntas para tu hijo o hija de 8 años

  • ¿Qué tres palabras te describen mejor?
  • ¿Qué te ha hecho sentir orgullo hoy?
  • ¿Qué crees que pueden hacer los padres de familia o los maestros para frenar el acoso escolar?
  • Si pudieras escribir un final diferente para el libro que estás leyendo ahora mismo, ¿cuál sería?
  • ¿Por qué crees que algunos niños fuman o toman drogas?
  • ¿Cuál es tu mayor preocupación?

Formas de ayudarles a crecer y desarrollarse

  • Desarrolla una actitud familiar hacia la positividad corporal. Tener una relación cómoda con su cuerpo es la base de una sexualidad sana (enlace en inglés) en años posteriores.
  • No te olvides de las fiestas de baile en familia para divertirte con el movimiento. Cuando le pides que te ayude a inventar un baile para una canción cualquiera, está creando un vínculo contigo y moviendo su cuerpo.  
  • Sigue leyéndole, aunque ya pueda leer de forma autónoma. Crea un hogar propicio para la lectura y sé un ejemplo leyendo tú misma. Háblale sobre los libros que estás leyendo y pregúntale sobre los suyos (véanse las preguntas anteriores).
  • Refuerza las reglas y establece límites adecuados aunque a los 8 años sea cada vez más independiente o intente sobrepasar los límites.
  • Niños que hacen quehaceres (enlace en inglés) aprenden a ser responsables y adquieren valiosas habilidades para la vida que les serán útiles en el futuro. Además, hacer quehaceres les ayuda a sentirse más competentes y como si formaran parte de un equipo.
  • Mantén una estrecha comunicación con los maestros, otros empleados de la escuela y los padres de sus amistades de tu hijo para estar al tanto de posibles problemas.
  • Ayúdale a ser un modelo positivo plantando cara al acoso escolar. Aunque no sea la víctima del bullying, enséñale lo importante que es intervenir: puede defender a una víctima, ofrecer apoyo o cuestionar los comportamientos del acoso. Representa en casa ésta y otras situaciones difíciles. El acoso escolar puede tener consecuencias duraderas para los niños.

Todos los niños, en particular algunos de 8 años, parecen tener un ansia infinita de información. Sus preguntas pueden ser sorprendentes, agotadoras e incluso molestas. Cuando te sientas en un aprieto, está bien ganar tiempo, siempre y cuando hagas un seguimiento. Intenta decir: «Esa es una buena pregunta. Quiero asegurarme de que tengo la respuesta correcta. ¿Podemos hablar más de eso cuando regreses a casa?». Nunca te enfades con tu hijo o hija por plantear un tema.

Cuando estés preparada para responder a sus preguntas, dale solo pequeños fragmentos de información cada vez. Para los adultos es fácil dar demasiadas explicaciones. En su lugar, prueba a empezar con «¿Qué has oído sobre [el tema de la pregunta]?» para saber de dónde parte. No tengas miedo de hablarles de temas difíciles como presión social (enlace en inglés), bullying, el consumo de drogas y la sexualidad. Encuentra formas adecuadas a su edad de responder a las preguntas sin aumentar la confusión o el miedo.

Es importante que los padres hagan preguntas a sus hijos de vez en cuando. Plantear a tu hijo o hija de 8 años preguntas bien pensadas puede ayudarle a ampliar sus puntos de vista y a tener una mentalidad más abierta. Además, puedes aprender más sobre ellos y sobre cómo facilitar o guiar su transición desde los «ochos extremos» hacia la preadolescencia y la adolescencia.

Revisado por el equipo clínico de Ovia Health


Fuentes

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