¿Cuándo puede o debe ir descalzo mi niño pequeño?

Es difícil caminar por el pasillo de los zapatos para bebés sin decir ¡oooh! o ¡awww!, pero por muy lindos que sean, los expertos sugieren que se limite la frecuencia con la que se confinan esos pequeños pies, especialmente en estos primeros años.

Beneficios de quitarles los zapatos

Cuando tu niño comience a caminar, querrás escogerle un zapato de apoyo que le proteja sus pies de una lesión o infección que puede venir del exterior. Aún así, mantener sus pies, todavía en desarrollo, atrapados dentro de los zapatos durante la mayor parte del día puede en realidad obstaculizar el desarrollo natural de los pies, por lo que también es importante pasar mucho tiempo descalzo alrededor de la casa y en otras áreas seguras durante el día.

Los bebés crecen constantemente y sus pies no son una excepción. A medida que los niños pequeños empiezan a dar sus primeros pasos, sus pies todavía se están desarrollando y no tienen huesos completamente formados. Más bien, sus pies están compuestos de cartílago y tejido, con tendones y ligamentos que se desarrollan a medida que se usan los pies. Esto significa que el hecho de limitar el crecimiento de estos pies en los zapatos la mayoría de las veces puede tener un impacto en la forma en que crecen. De acuerdo con la Academia Americana de Pediatría, el mejor desarrollo de los pies ocurre cuando los pies jóvenes pasan la mayor parte del tiempo descalzos.

Otros bonos de pies descalzos

Los pies tienen una de las concentraciones más altas de terminaciones nerviosas en el cuerpo, diseñadas para ayudar a las personas a adaptarse al mundo que les rodea. Permitirles a los bebés ir descalzos al aire libre les permitirá sentir el suelo debajo de sus pies directamente, lo que puede ayudarles a afinar su equilibrio así como su apreciación por la naturaleza. A menos que estés en un área donde pueda haber un peligro oculto, como vidrios rotos, dejarles explorar sin zapatos, incluso el exterior, les ayudará a conectarse mejor con la naturaleza.

El calzado ciertamente tiene su lugar, pero liberar el pie también tiene beneficios innegables. Dejar que los pies respiren es una buena manera de reducir el riesgo de infección, y el hecho de tener calambres en los zapatos todo el día puede afectar la forma en que los pies pequeños se desarrollan naturalmente. El niño pequeño tampoco es el único que puede disfrutar de un poco de tiempo descalzo – la próxima vez que estés a punto de ponerte unos zapatos, considera tú también la posibilidad de dejar tus pies libres por un tiempo.


Fuentes
  • Academia Americana de Pediatría (AAP). Staheli, Lynn T. «Zapatos para niños: Una revisión». Pediatría 88.2 (1990).
  • Mary L. Gavin. «Movimiento, coordinación y su niño de 1 a 2 años».KidsHealth. La Fundación Nemours, septiembre de 2014. Web.

Related Topics

Find the Ovia app for you!
Get our app at the Apple App Store Get our app at the Apple App Store Get our app at the Google Play Store Get our app at the Google Play Store